ENTREVISTA A HELEN TROCEL

Helen Trocel es venezolana y ejerce sus diversas actividades escrabbleras en España. Se mueve en todas las facetas del mundo scrabble y esta temporada se esta distinguiendo en su vena más periodística. Como jugadora firmó una pasada temporada excelente y cada vez que se marca una meta competitiva se prepara a conciencia para ello. Esta temporada cuenta con grandes objetivos.

¿Cuándo empezaste a jugar y cómo?

Empecé en el año 2010, llegué a través de Alejandro Terenzani quien me invitó a competir en el primer torneo de la temporada que se llevaría a cabo en nuestra alma máter: la Universidad Central de Venezuela. Asistí, pero solo hice de monitora. No conocía nada del juego…me gustó el ambiente y su gente, ya al siguiente me animé a participar, aunque mi desempeño de entrada fue un completo desastre. Luego, Isor Álvarez se encargó de pulirme, es y será siempre mi primera mentora.

Después del paso por el scrabble venezolano y argentino, llegas a la competición española. ¿Qué diferencias encuentras en los tres tipos de juego en torneos oficiales?

Se dice que nosotros los venezolanos tenemos tendencia al juego cerrado, a diferencia de los argentinos que les encanta un tablero abierto, razón por la cual hay muchos scrabbles en la mayoría de sus partidas…tienden a ser aperturistas. En cambio, en España me he encontrado un fifty-fifty, algo que me ha hecho sentir más cómoda y relajada al momento de jugar.

¿Cuáles crees que son tus virtudes y defectos como jugadora?

Empecemos por lo malo, los defectos. Si me llevan una ventaja de 200 puntos, ya tiro la toalla y no precisamente en la playa. Vamos que ni me preocupo por hacer el conteo de letras, me resulta difícil remontar, quizás me vuelvo rápidamente pesimista y eso me bloquea mentalmente por completo, lo cual puede echarme a perder lo que reste del torneo. Una especie de autosaboteo por así decirlo. El tema de la actitud sigue siendo algo para mejorar, tanto en el tablero como ante un oponente. Hay personas que quiero, pero con las que difícilmente quiera o me guste jugar (casos como Alejandro Terenzani o Santiago Rosales), hay un algo en sus actitudes sea que ellos vayan ganando o perdiendo, que me perturba y me jode toda la partida. Pero es algo que debo trabajar internamente para que no me afecte al momento ni el resto del día.

Las virtudes. Tengo buena retentiva y una memoria fotográfica espléndida, no me cuesta estudiar listados y usualmente las palabras que mejor se me graban son las que me juegan en competiciones o que visualizo mientras estoy retransmitiendo o tomando fotos. No soy de las que hablan durante la partida ni te pongo mala cara o algún gesto feo si voy perdiendo. Creo que en líneas generales es ameno jugar conmigo.

Subcampeona catalana de segunda categoría, número uno del ranking, y campeona de España por equipos sub 1800 ¿Qué perspectivas de competición barajas para la presente temporada?

Por temas personales no sé si jugaré la presente temporada por completo, pero el objetivo lo tengo claro: ganar un sub 1800 y lograr el ascenso a lo que por costumbre denomino la liga A. También quiero lograr el mejor debutante en un campeonato nacional de España (algo que requiere meses de estudio y preparación constante y sonante, por lo menos en mi caso). Si logro ambas cosas, ya me puedo morir en paz…Bueno no, que tengo también pendiente clasificarme a un Mundial. Un paso a la vez, que luego del apuro sólo queda el cansancio. Lo cierto es que estoy contenta con lo logrado hasta entonces en España, es equivalente a los logros que obtuve en mi país. De Argentina no puedo decir lo mismo porque por cuestiones laborales no pude competir casi ni seguir creciendo como jugadora.

Además de jugadora clásica, juegas duplicadas, organizas, arbitras, participas en talleres infantiles y retransmites eventos con gran éxito. ¿en qué faceta te sientes más cómoda o cada una tiene su momento?

Cada una tiene su momento. Pero si a nivel competitivo tengo que elegir entre el clásico y la duplicada, me quedo con la dupli. En mi percepción no soy yo contra el máster (éste siempre será el papá de los helados, el que más sabe, pues), es ponerme a prueba a mí. La duplicada me encanta porque me reta a superarme sobre todo en vocabulario.

Sea que organice, arbitre, participe en talleres infantiles de catalán o retransmita…siempre estoy en constante aprendizaje. La retransmisión es lo que me hace sentir más viva, porque se desarrolla mi lado profesional. Le doy rienda suelta a lo que me gusta: escribir, transmitir información, tomar fotografías, grabar videos…se siente como cuando haces algo por amor al arte. Eso es lo que significa para mí. Además, me gusta que las personas que no pueden asistir vivan cada momento como si estuvieran allí con nosotros.

Desde que entras en el mundo del scrabble en Venezuela, se han producido muchos cambios en el juego y en la idiosincracia de los propios competidores ¿Qué ha cambiado en positivo o negativo en este tiempo?

Uff, respuesta complicada. Lo positivo y lo negativo depende de la percepción de cada uno. La actualización del lexicón en 2017 fue un coñazo mental para todos, quizás menos complicado para los acostumbrados campeones…Les resulta más fácil actualizar la información en sus discos duros internos.

Por ejemplo, en Venezuela las cosas se hacen de una manera muy distinta a Argentina y España, quizás el último comparte ciertas similitudes con nosotros. A nivel personal me gusta que en España es como en mi país, tienen en cuenta a los sub 1800 al momento de premiar y también a los debutantes, quizás no todos los clubes pero la mayoría sí. Siempre he sido y seré muy pro de las ligas B y C, de darles mérito y protagonismo…Ya sé que no abundan los titos Enric, los Picciochi, los Olaiozola o los Ortega; pero la generación de relevo también cuenta y eso es algo en lo que Venezuela no deja de destacar a pesar de la crisis. En Argentina, más allá de que vivía día y noche laburando, quizás me animé muy poco a participar porque no concibo ir a un torneo, ganar e irme sin un premio. Todo esfuerzo merece un reconocimiento, así sea un diploma o un caramelo. Pero respeto las organizaciones y parámetros de cada asociación, por algo existe el libre albedrío…sólo queda adaptarse, más cuando eres extranjero.

De los mundiales no puedo decir mucho. Mi último fue Buenos Aires 2013, lo que ha ocurrido en adelante se volvió casi que impalpable para mí. Aun así, no sé por qué siento y pienso que los mundiales han ido perdiendo brillo, además de muchas ausencias sea porque han fallecido jugadores o porque el tema país lo complica cada vez más para viajar…Aclaro que es sólo mi percepción, puedo estar equivocada. A nivel personal tampoco estuve de acuerdo con el cambio de FISE a FILE, pero eso ya es harina de otro costal en el que no me quiero adentrar. De todas formas, espero volver en algún momento a un mundial, aunque sea para saludar. Hay personas que extraño por su lucidez competitiva y por su calidez en el trato.

Estrategas, cerradoras, aperturistas. ¿Dónde te encuadrarías y en que estilo de juego te encuentras más cómoda? 

No me gusta encuadrarme en el juego, creo que aplico de todo un poco. El día que me hice una revisión como jugadora, me di cuenta de que no me funcionaba estudiarme todas las posibilidades de una palabra como CRANEOS, porque mis atriles tienen más tendencia a consonantes que vocales o viceversa. La estrategia que elaboré para mí fue aprenderme en Anagramanía todos los scrabbles que tienen cinco consonantes y dos vocales, los que tienen cinco vocales y dos consonantes, y esas palabras de entre cuatro a seis fichas que tienen consonantes pesadas y son palabras poco comunes como ITZAJ, IDEAY, JATIB, TIPOY, IDISH, IJILLO y así sucesivamente. No me incomoda el juego macramé ni el abierto, me adapto.

Muchos jugadores comentan que te exiges mucho en la preparación para competir, en la propia competición y en el devenir de la temporada. Pero en esta se dan cita diversos factores que pueden afectarte: ¿En qué tanto por ciento distribuirías el azar, estrategia, vocabulario y psicología en el Scrabble y cual te motiva más?

Es cierto, me exijo demasiado y no me gusta ser conformista. Si en doce años de competiciones no he evolucionado tan rápido como he querido se debe más a mis ausencias en torneos nacionales e internacionales, que a una falta de disciplina o compromiso. Si debo englobar todo en un cien por ciento, al azar sólo le doy un veinte y el resto lo distribuyo entre estrategia, vocabulario y psicología. La que más me motiva es el adquirir vocabulario porque mientras más palabras me sé, más fácil se me hace navegar en las aguas del juego abierto o cerrado, quien sabe llevar un timón traslada su barco a buen puerto.

  ¿Qué le ha aportado el scrabble a tu vida?

El Scrabble es todo para mí. Me inició estando en mi época universitaria con diecinueve años. Me aportó y sigue aportando una gran parte de las personas más importantes de mi vida. Me llevó a conocer otros países y culturas. Me permite mostrar mi creatividad y profesionalidad. Es el amor y el desamor en su máxima expresión. El Scrabble me ha salvado y me ha sepultado en diversos aspectos. Es mucho de lo que soy como jugadora y persona. Es más que un juego o una pasión, es todo.

 Un apunte 

Gracias a Santi por la entrevista y a todos los que tomaran unos minutos de su tiempo para leerla.