Alicia Acosta se impone en el Abierto de Benicassim , acompañada en el podio por Arantxa Delgado y Joan Lázaro. Los tres dominaron estas posiciones desde la segunda ronda. La jugadora de la federación francesa, Maria Marta Gismondi fue la campeona sub 1800 (segunda categoría).
CRÓNICA
Ya desde la segunda ronda los tres de cabeza se repartían el pastel sin contemplaciones. Entre ello mismos se fraguaban las derrotas e incluso se permitían mucho antes del final, sacar dos puntos de ventaja a sus rivales. Alicia Acosta fue firme en este sentido, solo cayó ante Arantxa y su férrea defensa basada en encajar pocos puntos fue determinante, eso si, también lo fue el 678-303 con el que en la última ronda sometió a Joan Lázaro y le dio el triunfo final.
Arantxa Delgado, la subcampeona, la podio mundialista, no desmereció para nada el torneo. Ganó a la campeona pero cayó con Joan Lázaro. Su penar fue jugar el rey de la colina en la segunda mesa y con una rival que le daba menos puntos para el desempate y de hecho negándole de esa manera el título.
Joan Lázaro, el tercero en liza, perdió sus dos partidas contra Alicia Acosta, su compañera de club que le tuvo cogida la medida. Estuvo sembrado y en pocas partidas pasó algo de apuros.
Como siempre hubo jugadores que o bien sorprenden o bien decepcionan. Entre los primeros destacaban, Manoli Cano y Joana Rubio, ambas igualadas en todo hasta el final, donde incluso se jugaron dos partidas seguidas para finalizar volcándose del lado de la Cano, y dejando a la Rubio en un aposición final que poca justicia hacia a su desempeño en el torneo. Brilló también María Marta Gismondi, que en especial fraguó su gran torneo con una tarde de sábado magistral y un merecido título sub 1800..
Gustó y mucho Carlos Isusi, el jugador de Azuqueca de Henares, y promesa del Zajarí, que en sus últimos torneos suma dos títulos de segunda categoría y esta vez, una segunda plaza que iguala a su club y a los madrileños del Atriles. Cuentan de él, que no ceja en jugar buenos palabros, y que tiene facilidad en poner scrabble. Por ello se llevó el premio a la mejor jugada con un buenísimo MUÑEIRA.
En las decepciones, y especialmente porque se esperaba algo más de ellos, podemos encontrar a Marina Colson. Cierto que ya se le exige demasiado, pero es que nos esta acostumbrando mal, aunque la verdad merece un pequeño descanso al largo periodo de ascenso que llevaba. Bajó su nivel Pepe Baynat, que ya había alcanzado el top 20, y en Benicassim , su torneo talismán, esta vez no encontró su «flow» y todo sea dicho, casi por culpa de sus compañeros de club que no le dejaron pasar ni una.
Santi Rosales iba y venia en los marcadores. La verdad es que bastante hizo, máxime que jugar y aguantar en Castellón era una prueba médica. Maquilló y en especial tras ganar en la última a otro damnificado como lo fue Mocanu, el «nyolo» rebelde que en esta competición fue de más a menos, quizás porque le falta más rodaje de competición activa.
Camprubí y José Vicente Gil, fueron otros a los que les costó hallar su nivel. Justamente ambos han sido podio en este torneo alguna vez, pero especialmente en la mañana del domingo tiraron por tierra cualquier atisbo de expectativas favorables.
La otra gran batalla castellonense, fue la disputa del sub 1800. Hemos visto que la Gismondi e Isusi, apenas tuvieron rivales, al menos en la recta final, porque antes si que algunos les plantaron cara. Malpartida estuvo arriba casi todo el torneo pero se le fue de la mano en las dos últimas rondas; Andoni Castellano ganaba y perdía indistintamente, curiosamente ganando por errores del rival y perdiendo por errores propios; la «living» Lapieza, la verdad que llegó a parecer que iba por título pero su compañera de equipo, Eva Falguera le quitó sus opciones en pos de maquillar una actuación propia muy irregular.
Julián Rubio, el mejor del club de las Palabras Cruzadas, de los de Argamasilla hay que reconocer que brilló a buena escala y ello teniendo en cuenta que le falta más rodaje. Agnes Lantos a la que vimos mal de inicio se vino arriba a tal que avanzaba la competición. La de Alicante Graciela, le faltó continuidad en los marcadores, tal y un cansadísimo Xavi Piqué evidenciaron en la recta final.
A Campanella la injusticia de algunos cruces le perjudicaron, ya que aquellos que venían de fallar arriba descansaban en las profundidades contra el «nefario» de Castelldefels y eso ayuda poco. Igual que les pasaba a dos Zajaríes que este año no tuvieron opciones como fue Miguel Muñoz, que sufrió lo indecible o Pepa Blasco , que incluso se las vió y deseó para no sucumbir con peores resultados.
Y desde ya hay que nombrar a buena parte de los novatos del Club de las Palabras Cruzadas. Un gran esfuerzo que no resultará baldío para recoger experiencia. Tremendo Julián Rubio, en una gran temporada. Se permitió derrotar a una grande como la Colson, y aguantar en un largo torneo con estoicidad hasta el punto de mantener opciones de darle puntos a su club para la Carrera. Del resto de equipo, de todo un poco. Sufrió mucho y eso que sin perder la sonrisa, Teresa Rubio; trabajó a destajo peleando sus partidas al limite, Sergio Medina; arrancó muy mal y luego se fue viniendo arriba Mónica Cantón; y pagó muy caro algunos errores en los finales, Angeles Huertas a la que un poco de suerte no le hubiera venido mal.
Arbitró Arola Conesa, convertida ya en una de las juezas mas solicitadas de la competición, que incluso se permitió dar cuenta de el devenir competitivo con su seguimiento.
Sigue la temporada y la próxima en Cataluña, con un torneo menor de una jornada para luego acudir a Sevilla, donde el nivel puede dejar muchos heridos por el camino.