Javier Gilaberte juega en el Club Zajarí valenciano y en su primer torneo de scrabble salió vencedor. A partir de ahi todo fue ascender hasta llegar al número dos del ranking español. Aún debemos verlo en torneos de alto nivel de ELO o un Nacional, pero ciertamente quienes lo han enfrentado constatan que no es un bluf, destacando una exquisita estrategia y un vocabulario aun mejor.
¿Cómo te iniciaste en el scrabble?
Es curioso, pero todo nace a raiz de una operación de rodilla en el año 2.008 Estoy un largo periodo de tiempo de baja, y dispongo de mucho tiempo libre. En un momento dado, descubro una página de juegos online, OPQA. Me decido por jugar al Cruzaletras, que viene a ser básicamente el Scrabble.
A partir de ahí, siento mucha inquietud por aprender a jugar, pues me parece un juego fascinante. Para ello, me dedico más a ver partidas de jugadores experimentados, que a jugar. No obstante, soy una persona que cree que se aprenden detalles de todo jugador. Intento coger lo que pienso es lo mejor de todos y cada uno de ellos, y con eso y con mis ideas, me construyo como jugador.
Como apunte, en OPQA conocí a varios jugadores que juegan o han jugado de forma presencial. Por ejemplo a Paco Richetti, compañero del club scrabble Zajarí de Valencia, a Vanessa Amorós o Yaiza Martínez. Y otros, que también jugaban frecuentemente, pero que no llegué a conocer, como puedan ser Javier Peláez, Sergio Laiseca o Carlos Vera.
¿Cuáles son tus virtudes y defectos en el juego?
Estoy pensando, y como posible virtud solo se me ocurre la memoria, es cierto que puedo recordar una palabra rara que me han puesto, aunque hayan pasado años de ello, incluso en muchas ocasiones recuerdo quién la colocó.
En general, soy muy rápido jugando, esto no sé como catalogarlo, si como virtud o defecto, pues en ocasiones esa velocidad puede inducir a error.
Los defectos los tengo más claros, jajaja. Me aburro cuando intento leer alguna lista de palabras, no aguanto más de 10 minutos, y sé que esto es importante para ampliar el vocabulario.
Otro defecto a resaltar, es que durante las partidas nunca anotó las letras que van saliendo, solamente y alguna vez anoto mis atriles, para luego analizar si podría haber colocado en tablero algo mejor. Solo analizo las letras que quedan por salir al final , si veo que la partida está muy igualada, pero nunca anotando.
Además, en el desarrollo de las partidas, cuando pasa el turno al contrario, muchas veces se me olvida pulsar el reloj. Soy un desastre.
Mi concentración está en el tablero, llevo muy mal las anotaciones y el tiempo.
¿Llegaste durante el torneo a imaginarte colocarte tan alto en el ranking, y tan pronto?
Hay que partir de la base de que todavía estoy en partidas de ajuste, pues antes del torneo llevaba solo 28 partidas jugadas, repartidas en tres torneos oficiales. Esto hace, que si se me da bien un torneo suba muchos puestos en el ranking. Estoy en posición de ventaja.
Dicho esto, y durante el desarrollo del torneo de Castellón, cuando tuve varias partidas seguidas ganadas, algún jugador me comentó que me iba a poner con más de 2.000 de Elo, incluso podría estar en el Top 10-15 del ranking español, pero no me imaginé que tras el torneo quedara en el número 2. Todavía me parece surrealista.
Se te considera un jugador de amplio vocabulario, gran visión de tablero y muy rápido jugando. Buenas dosis que te dan buenos resultados. Con esos factores de juego presentes, ¿en qué tanto por ciento distribuirías el azar, estrategia, vocabulario y psicología en el scrabble y con cuales te sientes más identificado?
A ver, sé que sobre el tema del azar en el scrabble, hay mucha diversidad de opiniones. Desde mi punto de vista, el azar decanta muchas partidas hacia un lado u otro, principalmente aquellas que llegan con máxima igualdad cuando apenas quedan fichas en la bolsa. Es cierto, que cuando la diferencia de Elo es considerable, el factor azar disminuye. Si hablamos de porcentajes, yo al azar en general, le daría un 25% en la distribución de factores.
En cuanto a la estrategia, esta es un elemento importante en el juego, a mí gusta utilizarla. Cuando juego siempre pienso en la repercusión que puede tener mi colocación de la palabra en el tablero, pienso en posibles jugadas futuras, creo que hay que trabajar sobre la premisa del equilibrio. Soy amante de poner ganchos que continúan al principio o final de palabra, pero esto en ocasiones se puede volver en contra, pues en el circuito español hay multitud de jugadores que conocen estas prolongaciones de palabra. A la estrategia, yo le daría un 20% de porcentaje.
Dado que el scrabble es un juego de palabras, mi opinión es que el vocabulario es el factor principal para poder alcanzar un nivel alto. Fundamental conocer los verbos, es lo que más juego da, debido a su infinidad de conjugaciones. Al vocabulario en el escalafón de parámetros le daría un 45% del porcentaje.
Por último, creo que la psicología es un factor que complementa el juego, hay que saber mantener la calma para que la toma de decisiones sea lo más acertada posible, pues muchas partidas no vienen de cara, y es difícil afrontar el desarrollo de las mismas. Un 10% del porcentaje de factores le asignaría.
Hablando de los aspectos con los que me siento identificado, diría que son la estrategia y el vocabulario, aunque para mejorar debería contabilizar letras y estudiar más vocabulario. Se me hace cuesta arriba, jaja.
Con una competición cercana. ¿Cómo es tu entrenamiento para afrontarla con garantías?
Pues nada en especial, mi entrenamiento principal es la duplicada que jugamos los Lunes los del club scrabble Zajarí, y las partidas presenciales que hacemos los Viernes tarde.
Aparte de eso, prácticamente nada. Alguna vez juego esporádicamente partidas online en Scrabble Go, en su mayor parte contra la inteligencia artificial en su máximo nivel, para ponerme el listón muy alto. Lo mismo hago con la aplicación Classic Words, pero esta tiene el hándicap de no haber actualizado el diccionario en su última versión. Y por nostalgia, a veces juego en OPQA, con poca frecuencia. Pero esto es en general, cuando hay una competición próxima, no preparo nada en concreto.
En tu juego es difícil verte fuera de la partida o desconcentrado. ¿Qué puede sacarte de una partida y que aplicas para mantener ese ritmo ágil de juego?
Intento siempre estar dentro de la partida, pero me frustra tener malos atriles y que el oponente te apabulle con scrabbles y puntuaciones muy altas. Hay que asumir que esto ocurre a veces a favor, y otras en contra.
En ocasiones, sí que estoy algo nervioso, pero cuando juego intento ser inexpresivo, para no dar pistas de lo que pueda tener en mi atril.
En cuanto al ritmo ágil del juego, es cierto que en la mayoría de mis turnos tiro muy rápido, esto sí que es debido a mi forma de jugar durante años. En OPQA, donde empecé a jugar online, hay tiempo corto y limitado por turno. Esta agilidad la traslado a cuando juego en presencial, pero no en todas las tiradas, hay algunas que pienso requieren más reflexión.
Ahora en lo alto del ranking se te exige jugar altas competiciones o incluso arriesgar más saliendo. ¿Para cuando te veremos competir fuera de la Comunidad valenciana?
La realidad es que comienzo a jugar en presencial en el año 2.019, con mis compañeros del club scrabble Zajarí de Valencia. Me es muy cómodo jugar presencial en Valencia, pues aunque vivo en un pueblo, estoy cerca de la ciudad.
Por motivos familiares y laborales, se me hace difícil viajar a jugar torneos, y estar fines de semana enteros fuera de casa.
De hecho, solo he jugado 4 competiciones oficiales, 2 en Valencia y 2 en Castellón. Seguramente, una situación familiar distinta me permitiría asistir a más campeonatos. Este es un tema que he hablado en muchas ocasiones con mis compañeros de club, y que transmití desde el minuto cero de mi comienzo en el juego presencial. Algunos componentes del club, como puedan ser Paco Richetti, Miguel Carlos Muñoz y Mariví Gil, me insisten en que debería viajar a competir, porque dicen que tengo mucho potencial, ellos confían mucho en mí, se lo agradezco de corazón, pero las circunstancias mandan.
A pesar de todo, no descarto asistir a algún torneo fuera de la Comunidad Valenciana, pero es un tema que ahora mismo veo lejos.
