José Antonio Lozano es de Madrid y además de destacar como top 10 español, ejerce labores de presidente del Club Atriles. Ama la filología, la literatura, las palabras y no es de extrañar por ello que a este apasionado del ajedrez también le sedujera el scrabble. Tanto ha sido este afecto que cada dia se vincula más a todo lo que rodea este juego.
¿Cuándo empezaste a jugar al Scrabble y cómo?
Como muchos, jugué algo de pequeño, con el conocido Intelect, pero no tenía con quién y lo dejé, no creo que jugara más de ocho o diez partidas. Hace unos seis años, José Fernández contactó conmigo porque vio que había organizado un torneo navideño de Apalabrados para ajedrecistas, y tras mucha insistencia por su parte (lo que le agradezco), por fin un jueves me pasé por el local de Atriles. Creo que mi trayectoria vital me abocaba de forma natural a jugar a scrabble, solo que no lo sabía.
En tu caso, el hecho de tener una amplia formación en la práctica del ajedrez ¿Qué te provoca que podríamos aprender o exportar de este para proyectar al scrabble?
El scrabble en España solo necesita una cosa: muchos jugadores, y especialmente aquellos que tengan un bajo nivel. Eso permitiría al juego un mínimo de popularización. Hay clubs de ajedrez en Madrid y Barcelona con más jugadores que el conjunto nacional de scrabble. Para hacernos a la idea de la comparación, la liga madrileña de clubs, cuyas dos últimas jornadas se han aplazado por la crisis sanitaria, reúne durante 13 domingos al año en diversos locales a algo más de 1.200 ajedrecistas, quedando otros tanto en la reserva. La introducción en las escuelas también sería deseable, pero creo que el scrabble es una actividad más apropiada para adultos.
Varias temporadas en activo con títulos y podio en campeonato de España incluido, directivo de club e incluso árbitro. ¿Qué apasiona de este juego?
Una de las cosas que más me gusta es que, aunque con fallos, está bastante bien organizado. Cuando llegué era inevitable ir con ideas preconcebidas, y pensé que a esto jugarían cuatro con reglas de andar por casa. Eran cuatro, sí, pero muy bien organizado. Me gustó que se hubiera copiado al ajedrez en prácticamente todo lo que era extrapolable y me sorprendió enormemente el reglamento léxico, extremadamente bien desarrollado, así como el lexicón.
Por lo demás, como dije antes, era inevitable que acabara jugando a scrabble: me encanta el ajedrez, y la actitud mental y física que debes mantener en scrabble es la misma. De hecho, para mí no hay diferencia entre ambos juegos, considero que en lo general son dos variantes de lo mismo. Y por otro lado, por mis estudios y mi pasión por el lenguaje es una actividad que me permite consultar constantemente aspectos de filología hispánica a los que nunca había prestado demasiada atención. Además, siempre estoy jugando con palabras: durante muchos años di clases particulares de creatividad del lenguaje (talleres literarios) y como afición siempre me ha gustado fabricar crucigramas, que me ha venido muy bien entre otras cosas para hacer paralelos y juego cerrado en scrabble.
Me gusta dedicarme a cosas que no sirven para nada. Por ello el scrabble me encanta.
Como seguidor del scrabble en español, ¿qué ha evolucionado en positivo o negativo en estos últimos años?
No he encontrado ningún cambio en el tiempo que llevo jugando. Quizá uno, y es que echo de menos a la gente que progresivamente ha ido desapareciendo del juego y lo han dejado, ya sea en mi club o a nivel nacional. Los animo a volver. El scrabble puede resultar obsesivo y absorbente, por lo que es importante compaginarlo con otros intereses, para no saturarnos y abandonarlo.
¿Dónde está el principal reto de crecimiento del scrabble como juego o deporte?
Como apunté antes, es muy importante que captemos y mantengamos en los clubs a gente con nivel bajo. Es desesperante ver que alguien llega a tu club y en pocos días se dan cuenta de que no van a llegar al nivel de gente experimentada. Se aburren y lo dejan. Afortunadamente en Atriles hemos conseguido en el último año un grupito de gente con ese nivel bajo, y a partir de ahí cada uno progresa a su ritmo, pero sintiéndose integrado, más allá de los afectos personales que se tejen al margen del juego. Está muy bien que te enseñen jugadores más experimentados, pero a todos nos gusta competir y ello solo es posible si en frente tienes a menudo a alguien a quien ves capaz de ganar. No obstante, procuramos jugar todos con todos.
Estrategas, cerradores, aperturistas. ¿Cómo te definirías jugando? ¿Dónde te encuadrarías y en que estilo de juego te encuentras más cómodo?
Me gusta la estrategia y pensar bien las jugadas. No pasa nada por estar 15 minutos con una sola jugada si luego eres capaz de hacer cuatro en minuto y medio. Me adapto a cualquier tipo de juego que vaya saliendo, pues las fichas son las que imponen el tipo de partida, pero entre dos jugadas equivalentes suelo elegir la que creo más apropiada según las características del rival y la situación de la partida. Sin duda, las partidas que más me divierten, y a la vez las que más detesto, son las cerradas. Es lo más parecido al ajedrez, nada de utilizar la fuerza bruta en esas partidas en que cada jugador pone cinco scrabbles, muy espectaculares, pero nada más. Si fuera fútbol, diría que me divierte más un 1-0 de penalti injusto en el último minuto que un 6-5.
Relacionado con esto, siempre me hace gracia el premio a la mejor jugada, ya sea por puntos o por rareza. Entiendo que se haga y no lo critico, pero a menudo pienso que, en partidas donde me han impugnado cuatro scrabbles válidos, por su extrañeza, la mejor jugada que he hecho ha sido simplemente una de dos o tres letras, o incluso un cambio de fichas, tras estar pensando a lo mejor diez minutos. Creo que las jugadas más difíciles de hacer son, a menudo, un “por” o un “rúe” colocados en el lugar apropiado. Y normalmente esas son las jugadas que más aprecio en los rivales de nivel, más allá del típico “palabro” que desconoces.
En todo este periplo como jugador, ¿podrías hacer un balance de los jugadores que más te han sorprendido y a quienes destacarías en las diferentes facetas del juego: azar, estrategia, competitividad, vocabulario o psicología?
Me sorprenden mucho los jugadores con un conocimiento del vocabulario exhaustivo. Son aquellos que obtienen de manera habitual excelentes resultados en duplicadas y que obviamente están por arriba. Jugadores para los que no es raro conseguir un 95 % de los puntos en duplis, o clavar la puntuación más alta en 16 o 17 jugadas de las 20-22 de las que constan. Es raro que yo consiga pasar del 90 % de la puntuación. Su memoria y / o su capacidad de estudio están fuera de mi alcance; es mi gran problema y lo que me lastra más en el progreso, la falta de memoria. En ajedrez me ocurre igual, la memoria. Aquí afortunadamente la visualización de jugadas futuras carece de interés, y eso creo que es lo que me permite jugar bastante mejor al scrabble que al ajedrez.
¿Qué hay de cierto o falso en los tópicos de estilo de juego, en la organización de torneos, en la competitividad de jugadores, en la idiosincrasia de cada club o comunidad?
Me gustaría jugar más a menudo en Cataluña, creo que me lo pasaría bastante bien, aparte de que utilizo los torneos de scrabble como excusa para que, tanto Luisa como yo, nos podamos coger una semana de vacaciones, y Cataluña es uno de los sitios que más nos gustan. Pero los torneos de 6-7 rondas no me atraen y no me desplazo tantos kms. para ello. No es una crítica, entiendo que entre los diversos clubs catalanes se consiga gente suficiente para jugar torneos de un solo día, sin tener que sufrir gastos adicionales de pernoctación. Pero sí, me gustaría poder jugar más a menudo en Cataluña, creo que me lo paso muy bien con el nivel de scrabble allí. Y los andaluces, ya sea en Sevilla o en Fuengirola, que con el tópico del juego cerrado, que se cumple a medias, tienen un nivel muy potente en general. En el momento de escribir esto tendríamos que estar jugando el torneo de Sevilla, que, desgraciadamente hemos tenido que suspender, así como el nacional, por la lamentable situación sanitaria que estamos viviendo. Por otro lado, me gustaría tener la experiencia de jugar algún mundial, pero se me hace extremadamente caro.
¿Modificarías algo a nivel internacional?
Como dice el tópico, “me alegra que me hagas esa pregunta”. Para mí es importante desligarse de la marca comercial mattel, en la medida que sea posible. Nosotros estamos aportando lo más importante, que es el lexicón con el que se juega a nivel oficial, y que debería ser la punta de lanza de FISE (o como se llame ahora). Me parece buena la implantación de lo que está haciendo México, Léxico (¿le habrán puesto el nombre paronímico a propósito?). Si Mattel se aviene a colaborar, debemos seguir utilizando su juego. Si no, tal vez sea el momento de sacar nuestro propio juego, rediseñarlo y sacarle rédito llegado el caso.
También creo importante que se revise el reglamento internacional, que lleva muchos años sin ser modificado, y en la medida de lo posible, reunificarlo con el reglamento español. Hay reglas que no están claras y difieren. Creo que también convendría estudiar la posibilidad de que todos los torneos oficiales de los diversos países, como mínimo los nacionales, fueran válidos para un elo internacional.