Con claro dominio de los jugadores del Club Atriles, Miguel Ángel Henares logró si primer triunfo en un absoluto del Circuito español, Un hito más grande si cabe cuando sus siete rivales en liza le superaban en el ranking ELO. José Fernández finalizó en segunda posición y Wifredo Vellosillo, tercero. El argentino del club de la capital culmino el capítulo atrilero con su triunfo en el sub 1800.
CRÓNICA
«Ya no juego más lo que resta de temporada» comentaba Miguel Ángel Henares tras un triste desempeño en el Campeonato de España. Por supuesto jugar en Madrid no entraba en sus planes una vez pensaba viajar a Lisboa para ver a su querido Atleti en la final de Champion futbolera.
Pero al final se quedó en casa y como no, se inscribió al Abierto de la capital. Lo que pasó después ya se sabe…ganó su primer torneo oficial y a lo grande, una vez por el camino sólo se encontró a rivales por encima de él en ELO., un hecho aislado que convendría revisar por si se ha producido alguna vez.
La pauta del torneo la marcó ese huracán bilbaino que con la quinta marcha puesta, parecía destinado a imponerse sin paliativos. Jose Fernández no paró de ganar hasta que se cruzó en su camino el «pingus» Henares, derrota que fue vital para que en el criterio de desempate el torneo cayera para el lado del madrileño. Y eso porque despues de su mach ambos continuarían resolviendo con triunfos sus papeletas.
Amen de los dos atrileros, otros estaban en esa lucha por el podio: Wifredo Vellosillo era el más guerrero y solo pudieron con él los dos grandes del fin de semana. Con uñas y dientes defendió su privilegiada posición hasta subirse al carro de ganadores; luego de la primera jornada tambien contaban Juan Novoa y Teresa Soler, pero el domingo se les hizo largo y si a la segunda las primeras mesas le pesaron, el primero se dejó parte de sus opciones contra Santi Rosales que venía de abajo y al que le movia sed de venganza hacia el madrileño del SG.
Madrid también significaba el regreso de algunos jugadores a la competición: Antonio Moya que decía sentir buenas vibraciones venía de una ausencia de más de un año y siempre miraba a las primeras mesas; también Lino Aguiar o Felix Martinez regresaban, el primero para luchar por el podio y el segundo para dar más que buen lustre a su desempeño. Vicenta Mansilla, era caso aparte, de nuevo estaba activa en temporada española tras su periplo argentino y como algunos predecían estaba para brillar especialmente en la mañana sabatina duplicada.
También dejaron sensaciones agradables dos jugadores como Joan López que fue de menos a más o el rosarino Guille Pognante que sumó su primer triunfo sub 1800 en el circuito español.
No fue el dia de Patxi Navarro que estrenaba número uno español y campeonato de España. Escogió un mal dia tras cruzarse media Francia y España para llegar a tiempo, pero las cosas nole salieron. Eso sí, los campeones lo son por algo…¿no hay torneo? pues hacemos algo grande… El murciano se llevó el premio a la mejor «palabra» y arrasó con una partida de anales estadísticos con más de 500 puntos de ventaja y 767 p. para el saco. Tampoco Ivette González pudo desplegar su talento pese a que continuamente subía a las primeras mesas sin fortuna.
Peor le fue a Jose Antonio Lozano que de mejor debutante la pasada temporada, ganador en Málaga y animador el pasado febrero en la capital, casi se sale de la clasificación con su peor torneo con diferencia. Penúltimo y gracias a Luisa López, consorte que se encontró con un duro debut.
Y así fue Madrid, capital mundial del fútbol y centro del scrabble español todo el fin de semana. Nadie perdió como pudimos ver en la entrega de premios: el juez madridista de pro, contento por el futbol y el campeón irredento colchonero, contento por el scrabble.
La capital dice adiós a la competición oficial hasta la próxima temporada.
