Enric Hernández se impuso en el primer amistoso de la temporada 2011-2012 disputado el pasado viernes en Cerdanyola. Este torneo esta organizado por el Club local y es un clásico previo al primer oficial. En esta segunda edición se produjo un triple empate tras cuatro rondas con medias superiores a los 500p.
CRÓNICA
NO SÉ. Así empezó el cuento, un 23 de julio de la postrera revolución terrícola del decenio pasado, en pocos guarismos, del 2010. Al cruzar la calle de Portugal, las ideas iban asentándose y de los 16 anagramas posibles se estaban filtrando los más plausibles. De repente se impuso la solución. Ideal, lógica, imbatible, irrebatible. ¡NESO! Es posible que la taza de Nescafé de hacía una hora influyera ocultamente en la elección, aunque la verdad está mucho más cerca de Portugal, hacia el Sudoeste, SO, en una zona semidesértica habitada por seres ágiles y graciosos, como las gamuzas y las gacelas, y también en el extremo opuesto, el Nordeste, NE, en una peligrosa zona bermeja, donde moran al menos 5 recios escrablícolas. De forma que al pisar el umbral del Grau, ya teníamos dispuestos forma, nombre, material para jugar y actores.
El resto ya lo sabemos de sobra, Marián nos dio una clase magistral de cómo se juega al Scrabble en Extremadura, y nosotros pagamos las cervezas y las patatas bravas.
Pero llega el 2011. Y junto con él, el primero de julio. Día por lo demás muy normal, sin precipitaciones atmosféricas y algo bochornoso. Aunque las apariencias engañan. Porque el Grau está que explota. Y no juega el Barça, sino 4 cerdanyolenses, 1 villafranqués y una emérita emeritense. Temblamos nosotros, las mesas, las cañas y las fichas.
El resto ya lo sabréis en seguida. El SP pasó de 3 a 4 rondas, intervalo de horas que Enric, Miguel y Neme aprovecharon a tope para sumar 500 puntos por partida (o más) y asegurarse de esta manera poco británica las 3 plazas superiores. Algunos parroquianos del bar dieron fe de que hubo una cuarta presencia barbuda y germánica, cuyo único rastro quedó patente en la clasificación final, y que nosotros conocemos sólo de los cuentos que los abuelos nos decían en las noches de frío invierno, el temible hechicero Buchholz. Huelga decir qué pasó en la mitad inferior, salvo que alguien nos COMPELA a hacerlo, siempre en la horizontal de un nónuple.
De manera que pronto escribiremos 2012, NESO-3, y un relato más que todavía no ha tenido lugar